Mi confrontación con la docencia.
Hola a todos.
Mi profesión de origen es Licenciado en sistemas computacionales, esta profesión me llamó mucho la atención desde que cursaba los primeros semestres del bachillerato, ya que fue ahí donde comencé a tomar clases de computación. Gracias a que dichas clases habían despertado en mi un gran interés y curiosidad por aprender más acerca de ello, decidí e informé a mis padres que estudiaría la licenciatura en sistemas computacionales.
Durante los estudios de bachillerato y de universidad, nunca pasó por mi mente la posibilidad de ser docente, hasta que terminé de cursar la licenciatura y en el CBTis 177 se abrió la posibilidad de contratar personal para cubrir asignaturas del área informática, como ya lo he comentado, al principio creí que era solamente realizar un trabajo técnico, de transmitir a un grupo de jóvenes un poco de los conocimientos técnicos que había aprendido en la universidad combinados con la poca experiencia laborar que en ese entonces tenía. Posteriormente, también ingresé a impartir clases en una universidad particular, de esta manera gran parte del día convivía con los alumnos al grado de comenzar a conocer sus problemas e inquietudes dentro y fuera del salón de clases.
Al comenzar a involucrarme con los alumnos más allá de un simple facilitador del conocimiento, me di cuenta que la profesión docente es mucho más compleja ya que debemos preparar a los jóvenes para la vida que al final de cuentas resulta aún más importante que los conocimientos técnicos que pudiéramos transmitirles.
Hoy en día como orgulloso docente del CBTis 177, tengo la gran responsabilidad y oportunidad de ser guía para que mis alumnos egresen con conocimientos técnicos sólidos que les permitan cursar de la mejor manera sus estudios universitarios. Además aconsejarlos de mil maneras para que dentro de su visión de vida incluyan valores esenciales para su buen desarrollo en la sociedad.
Como todo trabajo, ser docente tiene sus satisfacciones e insatisfacciones, para mi de las mayores satisfacciones que he recibido es el hecho de que los alumnos me perciban como un amigo, que me saluden con respeto por las calles y saber que muchos de ellos cursan exitosamente sus estudios universitarios. En cuanto a insatisfacciones, la falta de material didáctico, las computadoras no son suficientes, en el plantel sólo tenemos un proyector, y algunas veces no tenemos plumones para escribir en los pizarrones, en fin el ambiente de aprendizaje no es favorable.
En conclusión, nunca soñé con ser docente, pero se presentó la oportunidad y la tomé, hoy en día soy feliz con mi profesión de docente y por ello me inscribí en esta especialidad para poder desarrollar mi profesión de docente de la mejor manera posible.
Saludos a todo el grupo, hasta luego.
